Alitas de pollo marinadas al horno

Las alitas de pollo es una de las partes junto con los muslos que tienen la carne más jugosa y melosa, por eso en casa nos encantan. Es difícil equivocarse haciendo unas alitas de pollo y a poca gente no les gustan, pero si además las dejáis marinando unas horas o incluso de un día para otro entonces seguro que os van a encantar.

Además este marinado lleva un poco de azúcar moreno entre sus ingredientes haciendo que estas alitas marinadas al horno se caramelicen y estén para chuparse los dedos. El tiempo de horneado variará en función del tamaño de vuestras alitas y de lo doradas y crujientes que os gusten, simplemente ir vigilándolas hasta que estén a vuestro punto.

Si queréis completar el plato podéis poner en la bandeja del horno junto con las alitas unos daditos de patata pochados previamente en la sartén y que acabarán de hacerse junto con el marinado de las alitas quedando deliciosas.

Alitas de pollo marinadas al horno

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Mejora tu plato de alitas de pollo utilizando este marinado.

• Barbara G

• Cocina: española
• Tipo de receta: carnes
• Raciones: 3

• Tiempo de preparado: 1M
• Tiempo de cocinado: 15M
• Tiempo total: 16M

Ingredientes

• 500 gr. de alitas de pollo
• 40 gr. de aceite de oliva
• 1/2 cebolla
• 2 cucharadas de tomate frito
• 2 cucharadas de azúcar moreno
• 1 cucharada de orégano seco
• 2 dientes de ajo
• 1 pizca de sal
• pimienta
• 1 pizca de pimentón (si os gusta el picante podéis ponerle pimentón picante)
• 20 gr. de vino blanco

Preparación

1. Echar en la jarra todos los ingredientes del marinado, el aceite, la cebolla, los ajos, el azúcar, el tomate frito, el vino, el orégano, la sal, la pimienta y el pimentón. Mezclar durante 15 segundos a velocidad 6.

2. Colocar las alitas en una fuente y cubrirlas con el marinado que acabamos de preparar. Dejar reposando en la nevera unas horas o de un día para otro.

3. Meter las alitas en recipiente apto para horno y hornear a 220ºC, durante unos 15 minutos con el grill en marcha. Ir dándoles la vuelta para que queden doradas por todo el exterior y jugosas por dentro.