La crisis del cacao: impacto global, desafíos locales y el incierto futuro del chocolate

  • El cambio climático y enfermedades están devastando los cultivos de cacao, reduciendo considerablemente las cosechas en México y África Occidental.
  • El precio del cacao ha alcanzado máximos históricos, duplicando su valor y afectando tanto a productores como a consumidores.
  • A pesar de la crisis, existe una oportunidad para revalorizar el cacao mexicano como un superalimento de alta calidad.
  • Producir chocolate de alta calidad se está convirtiendo en un lujo, lo que podría cambiar la dinámica de la industria chocolatera a nivel mundial.

Crisis del cacao

El cacao, conocido como el «oro marrón», vive actualmente una de sus crisis más profundas en la historia reciente. Los efectos del cambio climático, enfermedades devastadoras y la creciente demanda mundial han colocado a esta industria en una encrucijada sin precedentes. En una situación en la que la oferta no puede satisfacer la demanda, los precios del cacao se han disparado, afectando tanto a los productores como a los consumidores y la industria chocolatera global.

México y África Occidental, regiones cruciales en la producción de cacao, están siendo particularmente golpeadas por esta crisis. En México, el cacao, con raíces profundas en la cultura prehispánica, enfrenta una caída de cosechas del 80%, mientras que en África Occidental, responsable del 70% de la producción mundial, los cultivos sufren las consecuencias de fenómenos climáticos extremos y plagas.

El impacto del cambio climático en los cultivos

Cultivos de cacao afectados por el clima

El cambio climático ha alterado de manera drástica los patrones climáticos, afectando severamente los cultivos de cacao. Tanto en México como en África Occidental, las sequías prolongadas seguidas de lluvias intensas han generado un impacto devastador en las plantaciones. En el caso mexicano, expertos como Armando Muñoz Vasconcelos y Lizbeth Hernández Torres han señalado que las pérdidas en algunas regiones alcanzan hasta un 80% debido a estas condiciones extremas.

Además, las enfermedades como la moniliasis del cacao, un hongo que prospera en condiciones de alta humedad, han empeorado la situación. Según Muñoz Vasconcelos, muchos productores no han podido controlar esta plaga, que se ha vuelto recurrente con el aumento de las precipitaciones.

En África Occidental, los fenómenos extremos asociados al cambio climático, como el fenómeno de El Niño, también han jugado un papel crucial en la reducción de las cosechas. El déficit global de cacao en la temporada 2023-2024 alcanzó las 478,000 toneladas, marcando un récord negativo de más de 60 años según la Organización Internacional del Cacao (ICCO).

Precios récord y tensión en los mercados

Precios del cacao en máximos históricos

La escasez de cacao ha llevado los precios a niveles históricos. En México, el kilo de cacao ha pasado de costar entre 60 y 80 pesos a un rango de 220 a 250 pesos. Esta misma tendencia se observa a nivel global, donde los precios de futuros del cacao superaron los 12,900 dólares por tonelada.

Estas cifras han generado un efecto dominó en toda la industria chocolatera. Grandes corporaciones como Hershey y Mondelez han tenido que revisar sus estrategias, mientras que los chocolateros artesanales enfrentan grandes desafíos para mantener la calidad de sus productos. En palabras de Lizbeth Hernández, «comer una barra con un 70% de cacao será un lujo en los próximos 10 años».

Los fabricantes están considerando opciones como disminuir el porcentaje de cacao en sus productos o sustituirlo parcialmente con alternativas como las mantecas vegetales. Sin embargo, esto plantea un dilema para la industria, que lucha por equilibrar los costos con la calidad.

Oportunidades y retos para el futuro del cacao mexicano

Oportunidad para el cacao mexicano

A pesar de los retos, expertos como Armando Muñoz y Lizbeth Hernández ven en esta crisis una oportunidad para revalorizar el cacao mexicano. Ambos coinciden en que este superalimento, con una historia milenaria, puede ganar protagonismo en el mercado nacional e internacional si los consumidores aprenden a valorar su alta calidad.

«Cada vez que consumimos una barra de chocolate con un alto porcentaje de cacao mexicano, estamos apoyando a los productores y preservando una tradición cultural,» asegura Hernández. Por su parte, Muñoz enfatiza que será necesario un esfuerzo conjunto entre productores, autoridades y consumidores para superar esta crisis de manera sostenible.

Además, la crisis ha abierto un debate sobre la necesidad de desarrollar prácticas agrícolas más sostenibles y resistentes al cambio climático. Incorporar tecnología y métodos innovadores podría ser crucial para recuperar la productividad y garantizar un futuro más estable para el cacao mexicano.

El cacao sigue siendo un símbolo cultural y económico fundamental. Aunque la crisis ha puesto en jaque a toda la cadena de producción, también ha creado un espacio para reflexionar sobre la importancia de consumir de manera consciente y valorar un producto tan arraigado en la historia y la identidad de muchas culturas.


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