Este bizcocho es muy sencillo y práctico para tener siempre bollería casera, sana y de buena calidad en casa. Se prepara tomando como medida de los diferentes ingredientes el propio vasito del yogur.
Podemos tomarlo como desayuno, merienda o para acompañar el café de después de comer, e incluso dárselo a los niños para que lo lleven al colegio para tomar a media mañana.