El cóctel de gambas es un plato muy típico de la Navidad y a todos nos encanta, yo aún recuerdo aquellas copas de cóctel de gambas de las Navidades de nuestra niñez llenas de una mezcla de lechuga y langostinos bien embadurnada de salsa rosa, densa y dulzona, hecha a base de mayonesa y kétchup. Hoy lo hemos presentado de una manera un poco más actual con una mezcla gourmet de lechugas, unos gambones enteros mezclados con pedazos de piña en su jugo y aderezados con una salsa rosa suave y con mucho sabor. Añadimos un poco de granada por encima que, no sólo sirve para dar color a nuestra copa, sino que aporta un crujiente fresco y dulce que nos encanta.
La salsa rosa que suelo preparar no resulta muy dulce porque uso un kétchup sin azúcar, además el zumo de naranja y el licor la aromatizan de una manera muy agradable haciéndola también menos densa. Para esta salsa siempre uso mayonesa de aceite de girasol porque es mejor que no tenga demasiado sabor. La fórmula que utilizo para hacer la salsa rosa es: 4 de mayonesa + 1 de kétchup + 1/2 de zumo de naranja + 1/2 de brandy o whisky, puedes usar como medida lo que prefieras, un vaso de agua si quieres hacer una gran cantidad de salsa o el vaso dosificador del MyCook si quieres hacer una taza de salsa que es suficiente para estos cuatro copas de cóctel de gambas y aún sobra.
Cóctel de gambas y piña
Un entrante tan clásico como delicioso que podrás servir tanto en Navidad como en una noche de verano.
Variantes y consejos
Puedes utilizar gambas grandes pero también queda muy rico con gambones y con langostinos pequeños, todos pueden ser frescos o congelados y también puedes usar langostinos ya cocidos.
Si prefieres servirlo en una fuente elige una de cristal que sea bastante profunda y vete haciendo capas alternando una de lechugas con salsa y una de gambas y piña, no seas generoso con la salsa para agradar a los que lo toman con poca pero deja sobre la mesa una salsera con el resto de la salsa rosa para que cada uno pueda añadir más si lo desea.