La lasaña de pollo es un plato sencillo y muy completo para el que podemos emplear la receta de bechamel que vimos el otro día.
Podemos congelarla antes de su horneo y de ese modo tener siempre lista para emergencias una comida o cena que, acompañada de un entrante ligero, puede tomarse como plato único. También podemos llevarlo en la fiambrera para comer en el trabajo.
Lasaña de pollo
Una receta sencilla y completa que podrás congelar y también llevar fácilmente al trabajo.
Variantes y consejos:
- Podemos utilizar esta receta de bechamel. Para darle más sabor, en este caso aumentaremos la cantidad de tomate, agregando unas 3 cucharadas para la receta completa.
- Existen distintos tipos de placas de lasaña: algunas es necesario cocerlas, otras se ponen en seco y otras solo requieren remojo previo. Para mí estas últimas son las más prácticas y las que mejor quedan. En cualquier caso, a la hora de meter en el horno la lasaña deberemos observar las indicaciones de preparación.