Ahora que estamos en plena época de albaricoques, además de comerlos tal cual, es el momento de preparar mermelada con ellos. Creo que la mermelada de albaricoques es una de las que más me gusta, quizás uno de los motivos es porque ha sido un clásico en mi casa y mis padres casi siempre compraban esa y la de naranja (aunque la de naranja no me emociona un exceso…). Hacer la mermelada con nuestra Mycook es muy, muy sencillo y queda deliciosa.
Además de untarla en tostadas, podemos añadirla a los yogures, usarla de cobertura en algunas tartas o incluso utilizarla como ingrediente para hacer ricos helados caseros.
Con la cantidad que preparo en esta receta normalmente no me hace falta hacerle el vacío para conservarla, porque va directamente a la nevera y usándola en varias recetas y en los desayunos o meriendas acabamos con ella sin darle tiempo a que se estropee. Si queréis hacer más cantidad y conservar los tarros en la despensa seguir unas buenas prácticas para que se conserven adecuadamente.
- 500 gr. de albaricoques
- 420 gr. de azúcar
- 20 gr. de zumo de limón
- Pelar los albaricoques, quitar el hueso y echar en la jarra partidos por la mitad.
- Agregar el zumo de limón y el azúcar. Programar 15 segundos a velocidad 6.
- Bajar los restos que hayan podido quedar por las paredes con ayuda de una espátula.
- Programar 30 minutos, temperatura 120ºC, velocidad 3. Los primeros 10 minutos con el tapón dosificados puesto, el resto del tiempo se retira el tapón y se coloca el cestillo del revés sobre la tapa para evitar salpicaduras y favorecer que se evaporen los líquidos.
- Comprobar como ha quedado de espesor. Si la veis muy líquida podéis añadir 5 minutos más de cocción (siempre teniendo en cuenta que al enfriar se espesa).
- Una vez lista la mermelada introducir en un bote limpio, dejar enfriar y posteriormente conservar en la nevera hasta su consumo.
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