La salsa de tomate frito casera es un comodín en la cocina, podemos usarla como acompañamiento pero también como ingrediente para cocinar, para preparar platos de pasta o para las pizzas. Esta es mi favorita, una salsa de tomate frito light con menos de la mitad de aceite que la tradicional y que aún así resulta muy sabrosa. Con estos ingredientes obtendremos un frasco grande de salsa suficiente para seis buenas raciones, si no vamos a utilizarlo todo en los próximos días podemos guardarlo en dos frascos más pequeños y congelar uno.
La textura gruesa de esta salsa de tomate, que la hace más rústica y apetecible, se consigue utilizando tomate troceado de lata y colándolo para eliminar la mayor parte del líquido. Las latas de tomate, troceado o triturado, son ideales para hacer salsa y nos ahorran mucho tiempo al no tener que escaldar, pelar y trocear los tomates. Nuestra Mycook hace el resto evitando las típicas salpicaduras por toda la cocina que siempre acompañan a la salsa de tomate frito.
Salsa de tomate frito light
Envasa esta salsa de tomate para disfrutar del sabor casero en cualquier época del año.
Variantes y consejos
Si te gusta la salsa de tomate menos espesa evita colar el tomate, si la prefieres muy tamizada puedes usar una lata de tomate triturado en lugar de troceado.
Podemos medir el aceite con el tapón dosificador teniendo en cuenta que 40 gr. de aceite son unos 50 ml.