Se aproxima el día de San Valentín y por mucho que a la mayoría nos encante decir que no lo celebramos, nunca está de más tener algún pequeño detalle con nuestra pareja. Por ejemplo, prepararle la cena o, si ya lo hacemos todos los días, darle un toque especial.
Hasta los platos más sencillos y comunes pueden darnos una oportunidad de ver sonreír a nuestro amado. Y unos sencillos moldes de galletas nos dan la clave.
Sandwich de San Valentín
Si no tenemos tiempo, pero sí ganas, no hay excusa para no celebrar San Valentín.