Esta es mi propuesta para finalizar una velada especial de San Valentín o cualquier otra ocasión especial. El cóctel Rossini es originario de Italia,concretamente de la zona de Venecia y para su elaboración se utilizan principalmente fresas y prosecco (vino blanco espumoso italiano). El prosecco lo podemos sustituir perfectamente por cava o champán, lo que más nos guste.
Es un cóctel facilísimo de hacer, muy suave con el toque afrutado y dulce que le dan las fresas. Si las fresas no son vuestra debilidad podéis probar con otro cóctel veneciano, el cóctel Bellini que se elabora con melocotón.
- 150 gr. de fresas
- 10 gr. de zumo de limón
- 40 gr. de azúcar
- 50 gr. de hielo
- 1 botella pequeña de cava o champán (200 ml)
- Echar en la jarra las fresas limpias, el zumo de limón, el azúcar y el hielo. Triturar durante 30-60 segundos a velocidad 10, hasta que se nos forme un puré de fresas.
- Repartir el puré en 2 copas de cava y acabar de rellenar las copas con cava o champán.
Se recomienda servir este cóctel en copa alargada para evitar que el cava pierda las burbujas rápidamente.
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