Salsa rosa ligera, en estas fechas se utiliza mucho y para los que no quieren sobrepasar los límites de las calorías es perfecta. Es perfecta para acompañar unas gambas o langostinos cocidos, para ensaladas….para algún cóctel de marisco o para la tarta mimosa salada. Como veis es muy versátil y su sabor aunque no es el mismo de la original no tiene nada que envidiarla.
Para prepararla necesitaremos huevos cocidos y queso fresco que si además es desnatado pues mejor que mejor. Para darle un toque fresco diferente le suelo añadir un poco de jugo de piña.
Cuando en casa se acaba algún bote de tipo ketchup suelo lavarlos bien y guardar y así poder poner dentro la salsa rosa para dosificarla más fácilmente.