Un sencillo bizcocho de nata que sube de categoría y se convierte en una merienda de lujo gracias a las almendras laminadas y la naranja confitada, es ideal para paladares adultos y una buena opción si quieres hacer un dulce para regalar. Si prefieres un bizcocho para una merienda infantil te recomiendo el Bizcocho de coco relleno de Nutella, a los niños les encanta.
Este bizcocho de nata resulta muy suave y jugoso aunque hayamos usado nata para cocinar en lugar de nata para montar (con mucha más materia grasa) y no lleva aceite ni mantequilla por lo que la cantidad de grasa es bastante baja con respecto a otros bizcochos. La preparación en Mycook no sólo es fácil y limpia sino que nos asegura una crema bien emulsionada con la que conseguiremos un bizcocho muy esponjoso.
- 3 huevos
- 150 gr. de azúcar
- 200 gr. de nata líquida para cocinar
- 200 gr. de harina de trigo para todo uso
- 8 gr. de levadura de repostería
- un puñado de almendras laminadas
- cuatro rodajas de naranja confitada
- una cucharada de azúcar glass
- Encendemos el horno a 180º. Engrasamos un molde redondo de 22 cm. de diámetro y colocamos un papel de hornear en la base.
- Colocamos la paleta mezcladora en las cuchillas, echamos en la jarra los huevos y el azúcar, programamos 30 segundos 40º velocidad 3, después 4 minutos sin temperatura velocidad 3.
- Añadimos el resto de los ingredientes: nata, harina y levadura, programamos 30 segundos sin temperatura velocidad 4.
- Retiramos la paleta mezcladora y vertemos la masa del bizcocho en el molde, colocamos las rodajas de naranja confitada y espolvoreamos las almendras laminadas y el azúcar glass.
- Horneamos durante 40 minutos. Sacamos el molde del horno y lo dejamos enfriar durante 10 minutos, ahora podemos sacar el bizcocho y dejarlo sobre una rejilla.
- Cuando esté totalmente frío podemos quitar el papel de la base y colocarlo en la fuente de servir.
Variantes y consejos
Puedes variar el sabor añadiendo ralladura de naranja o de limón y utilizando otras frutas confitadas.
Los bizcochos batidos en Mycook siempre quedan perfectos y mejor aún si batimos los huevos y el azúcar a baja temperatura durante los primeros 30 segundos, obtendremos una mezcla lisa y suave que subirá de manera uniforme en el horno. El azúcar glass se espolvorea sobre la masa del bizcocho antes de hornearlo y de esta manera queda bien adherido a la superficie.
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